Ya toca despedirse de uno de los veranos más extraños que hemos vivido en años. Ahora que poco a poco, siempre respetando la ‘nueva normalidad’, muchos vamos retomando nuestras vidas ajetreadas, es posible que resulte más complicado de lo habitual encontrar momentos para sintonizar con uno mismo.
Por ello, hoy hablaremos del Yoga Nidra, una de las técnicas de meditación más antiguas que existen que busca lograr ese estado de máxima relajación y consciencia plena que tanto nos cuesta adquirir. En este post te contaremos todo lo que debes saber sobre el yoga nidra y sus orígenes, los objetivos de esta práctica y algunos de los muchos beneficios que aporta, ¿estás lista/o para descubrirlo?
Las Bases Del Yoga Nidra
Como bien ya debes saber, yoga significa unión. Unión de lo terrenal con lo espiritual, del ‘yo’ con el universo. La palabra sánscrita ‘nidra’ significa sueño. El hecho de combinar la palabra nidra con yoga implica que el sueño debe ser consciente y no inconsciente y profundo para poder considerarse yoga. El Yoga Nidra busca ese estado de plena consciencia mientras el cuerpo y la mente descansan.
A través de una meditación guiada nos inducimos en un estado de máxima consciencia entre el sueño y el despertar.
Diferencia entre yoga nidra y meditación
La diferencia principal entre ambas meditaciones es que en la práctica meditativa la atención suele dirigirse a un punto o tema en concreto, se usa el foco de atención como técnica de concentración (dharana). En el camino yóguico de los 8 pasos (o ashtanga yoga) este estado se consigue a través del abandono de los sentidos (pratyahara). En Yoga Nidra no queremos abandonar completamente los sentidos si no hacerlo de manera ligera ya que se necesita del oído para poder seguir las instrucciones del guía que nos está induciendo en la práctica. La clave es mantener un nivel alto de serenidad en el cuerpo y en los sentidos y no dejar que ninguno predomine por encima del otro.
Una diferencia secundaria sería la postura, mientras en meditación solemos sentarnos con las piernas cruzadas o en padmasana (postura de la flor de loto), en yoga nidra nos tumbamos en savasana.
Lo que si que ambas prácticas tienen en común es el objetivo final; llegar al estado de consciencia absoluta (samadhi).
Beneficios de practicar Yoga Nidra
Cuando el yoga llegó a occidente, parte clave de la práctica que es la meditación, pasó a estar en un segundo plano. En muchas ocasiones muchos nos hemos encontrado hipnotizados en clases de Vinyasa o Ashtanga con posturas imposibles como sirsasana (invertida sobre la cabeza) o pincha mayurasana (invertida sobre antebrazos). El Yoga Nidra, se posiciona como una práctica que nos ayudará a moldear la mente y estos son sus beneficios:
- Es una práctica que se focalizará en trabajar la positividad y el optimismo. Gracias a ello mejorarás tu autoestima y estado de ánimo.
- Calma la mente ayudando a aliviar el estrés.
- Te ayudará a retarte y superar mentalmente lo que parece imposible.
- Ayuda a reducir la tensión, la ansiedad y todos sus síntomas: dolor de cabeza, insomnio y dolor abdominal, entre otros.
- Ayuda a enfrentar objetivos que parecen imposibles, refuerza los pensamientos positivos.
- Práctica perfecta para mantener el equilibrio físico, mental y emocional, sobretodo en momentos convulsos.
- La meditación yoga nidra está vinculada con la liberación de dopamina. También mejora el ritmo cardíaco y equilibra el sistema nervioso autónomo.
Yoga Nidra como terapia para superar traumas
Se han hecho estudios que revelan que la práctica de yoga nidra puede ayudar a personas que sufren estrés post traumático. Este tipo de meditación se ha usado en veteranos de guerra y se han visto resultados asombrosos. El encargado de llevar el yoga nidra a los terrenos de la psicología clínica fue el Doctor Richard Miller con su método iRest. Desarrolló el uso del yoga nidra para rehabilitar soldados traumatizados por los horrores de la guerra y tratar sus trastornos.
Practica Yoga Nidra desde la comodidad de tu casa
El primer principio que hay que tener en cuenta es que se trata de un ejercicio que baja la temperatura del cuerpo, las pulsaciones y la presión arterial, por lo que es muy recomendable abrigarse un poco para no sentir molestias al cambiar las temperaturas. Te recomendamos que uses tu esterilla de yoga y acomodes tu postura con un cojín o un bloque de corcho colocado debajo de las rodillas.
Como en cualquier práctica de yoga es recomendable usar ropa cómoda y ligera sin costuras que molesten y una habitación silenciosa y con poca luz para poder llevar a cabo la meditación.
- Túmbate en el suelo en postura de savasana, procura que sea una postura relajada y sin tensiones.
- Cierra tus ojos y no los abras hasta que termine la sesión.
- Visualiza el lugar dónde te encuentras, dónde se ubica tu cuerpo, dónde está tu mente. Poco a poco ve fundiéndote con el suelo y mantén tu cuerpo inmóvil.
- Presta atención a la respiración para observar cómo tu cuerpo se va calmando. La respiración es la clave de la meditación ya que esta actúa como puente entre el cuerpo y la mente. También te ayudará a estar más presente.
- Ve cogiendo consciencia de quién eres y repite todas las frases positivas sobre ti mismo, sobre tus experiencias y sobre las personas y sensaciones que te rodean. No dejes que nada negativo se apodere de ti estos minutos. La consciencia emocional es una parte muy importante de este tipo de meditación.
- Poco a poco, cuando te sientas preparada/o podrás abrir los ojos y sonreirle al mundo.
En este vídeo encontrarás una meditación profunda guiada perfecta para tu práctica de yoga Nidra.
El yoga recorre un sendero sin fin pero el viaje es mágico. Disfruta del proceso y si te ha gustado este artículo te animamos a que lo compartas en tus redes sociales y nos dejes un comentario.