Cada persona se siente motivada por diversos motivos a la hora de empezar a practicar yoga. A veces empezamos por la parte física para trabajar nuestro cuerpo de una forma completa trabajando la fuerza, la movilidad y la flexibilidad. Otras veces, buscamos esa parte mental de desconexión para evadirnos del día a día, del estrés y las preocupaciones, y otras buscamos esa conexión con nosotros mismos y con el universo.
Sea cual sea el motivo por el cual estás pensando en empezar a practicar yoga o ya lo practicas, es bienvenido. Todo tiene un proceso y con la práctica sentirás como tus motivaciones a la hora de practicar Yoga van evolucionando y cambiando.
Descubre cómo combinar yoga y fitness en este post escrito por Cristina Raya, Entrenadora Personal y Health Coach.
¿Se puede combinar Yoga y entrenamientos de Fitness?
¡Absolutamente! Es más, en mi opinión como profesional del sector, lo veo estrictamente necesario. Eso sí, juntos pero no revueltos. Es decir, todo debe tener un sentido y una coherencia para que no te lesiones y obtengas todos sus beneficios.
“Por ejemplo, no es recomendable hacer una práctica de Hatha Yoga y después hacer un entrenamiento de pesas o un HIIT, en este caso deberías cambiar el orden.” Comenta Cristina.
¿Es Importante el Orden de los Factores al Combinar Yoga y Fitness?
Desde luego, el orden de los factores puede alterar altera el producto tanto a nivel físico como mental. Cuando practicas yoga trabajas la fuerza isométrica, la apertura de las articulaciones y la flexibilidad alargando la musculatura por un tiempo determinado, (además de trabajar conscientemente con tu respiración y empezar un trabajo profundo de sensaciones y autoconocimiento). Al mismo tiempo puede que en tu práctica se realicen pranayamas y, por supuesto, la postura de savasana (relajación final) para cerrar tu práctica y consolidar todo el trabajo que has hecho.
Teniendo en cuenta esto, si te fijas “no casa” para nada hacer este tipo de trabajo y justo después exigirle al cuerpo y a tu mente que estén a tope en un entrenamiento físico de pesas o entrenamiento funcional.
Primero Entrena, Luego Haz Yoga
Si antes le hemos pedido a los músculos que se estiren y se alarguen y después le pides a tu cuerpo que haga movimientos explosivos y de contracción continua en fases concéntricas y excéntricas (el músculo se “encoge” y se “estira”) pueden pasar dos cosas:
- Que te lessiones.
- Que “pierdas” el foco y el trabajo que hiciste anteriormente en tu práctica. En algunos casos podrías incluso salir más alterad@ de lo que empezaste.
Puedes practicar las dos cosas pero cambiando el orden. Primero haz tu entrenamiento físico y después termina con tu práctica de Yoga, de ese modo obtendrás muy buenos resultados:
- Aumentarás el rendimiento de tus entrenamientos y tus capacidades físicas.
- Consolidarás las dos prácticas. (Yo siempre termino los entrenamientos personales de mis clientes con una pequeña práctica de yoga que adapto según las necesidades. De ese modo trabajamos respiración, cuerpo y mente).
¿Cómo Puedes Empezar a Introducir el Yoga en tus Entrenamientos de Fitness?
Si (por ahora) no sientes realmente una atracción por la parte espiritual que nos aporta el Yoga, una buena forma de empezar a practicarlo y beneficiarte de algunas de sus múltiples ventajas es empezando por la parte física.
Lo ideal, es terminar siempre todos tus entrenamientos con una pequeña sesión de estiramientos para no lesionarte y aumentar el rendimiento.
Cambia Estiramientos Aburridos por una Divertida Clase de Yoga
“Las asanas de Yoga son mucho más completas y trabajamos por cadenas musculares así que estirarás varios músculos al mismo tiempo.” comenta Cristina
Si no tienes tiempo de hacer una hora completa de yoga, no te preocupes. En mi caso, cuando empecé a entrenar y aún no se conocía mucho el yoga por estos lares, incluía algunas posturas al terminar mis entrenamientos en el gimnasio. De este modo el yoga fue incorporándose de forma orgánica a mi rutina sin darme cuenta.
Ahora me doy cuenta de que hacía algunas posturas de yoga sin apenas conocerlas y sin saber que eso pertenecía a un grupo de asanas pero me gustaba estirar y notaba me sentía genial cuando terminaba cada entrenamiento. Por eso te recomiendo que empieces por aquí.
“Una forma muy práctica y sencilla de empezar a estirar tu cuerpo después de entrenar es haciendo unas pequeñas asanas que no te ocupen demasiado tiempo y te permitan introducirte poco a poco en esta disciplina.”, añade Cristina.
Beneficios de Combinar Yoga con Fitness
A nivel físico:
- Mejora en el rendimiento de tus entrenamientos.
- Prevención de lesiones.
- Mejora de tu postura, lo cual creará un efecto de elongación en tu cuerpo (figura más definida y esbelta).
- Alivio de tensiones post-entreno o dolores óseos o musculares.
- Mayor control de tu cuerpo.
A nivel mental:
- Aquieta la mente a través de la respiración y las posturas sostenidas lo cual te ayudará en la fase de “cool down” de tu entrenamiento (bajar pulsaciones, relajarte y darle la orden a tu cuerpo de que el entrenamiento ha acabado).
- Te ayudará a relajarte y liberar estrés.
Te animo a que pruebes y empieces a variar tus entrenamientos con 10 minutos de yoga al día. (Eso sí, te recomiendo que empieces por posturas sencillas para que puedas adaptar al cuerpo poco a poco o consultar con un profesional que pueda guiarte para que no te hagas daño).
Haciendo click aquí podrás encontrar una rutina post-entreno con posturas de yoga muy sencilla que se puede adaptar a todos los niveles. Te recomiendo que las hagas justo al terminar tu entrenamiento o en cualquier momento del día en el que necesites estirar tu cuerpo.
El yoga recorre un sendero sin fin pero el viaje es mágico. Disfruta del proceso y si te ha gustado este artículo te animamos a que lo compartas en tus redes sociales y nos dejes un comentario.
